Un estudio de científicos de Carolina del Norte ha descubierto que hay variantes genéticas comunes que influyen en la esquizofrenia, el autismo y la depresión.
Se trata de unos genes que controlan los niveles de calcio en el cerebro.
Pese a que es un gran paso para el diagnóstico de estos trastornos y enfermedades, no son determinantes para que el individuo los sufra.
Enfermedades y trastornos mentales como el autismo, el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), la depresión, el trastorno bipolar o la esquizofrenia pueden compartir factores de riesgo genéticos, según un nuevo estudio publicado hoy en la revista médica británica The Lancet.
Científicos del Consorcio de Genómica Psiquiátrica (Carolina del Norte) han descubierto que hay variantes genéticas comunes que influyen en estas enfermedades que se consideraban como clínicamente diferentes.
El estudio analizó y comparó los genes de más de 33.000 pacientes con alguno de estos trastornos con casi 28.000 sin ninguno de ellos. El objetivo del análisis era encontrar variaciones genéticas comunes que pudieran ser factores de riesgo de alguno de los cinco desórdenes mentales.