Las doce fobias más frecuentes en nuestra sociedad

Más del 3% de la población sufre algún tipo de fobia. Recogemos aquí aquellas que son más comunes en nuestra sociedad.

3 nov 2016 en Actualidad - Lectura: 3 min.
Las doce fobias más frecuentes en nuestra sociedad
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Una de cada diez personas padecerá alguna vez en su vida algún tipo de fobia. Los expertos apuntan que este miedo, provocado por determinadas situaciones u objetos, afecta más a las mujeres y está ligado a otros trastornos psicológicos, como la ansiedad y los ataques de pánico.

Los síntomas son muy similares: alteraciones cardiacas, sudor, hormigueo, molestias estomacales, temblores, sensación de ahogo…, síntomas que pueden superarse con la ayuda de profesionales experimentados en este tipo de trastornos emocionales. La mayoría de ellos incluye la exposición como paso necesario para aprender a controlarla, así como herramientas imprescindibles para superarlas, como la respiración abdominal, el control mental y la relajación, por ejemplo.

Hay identificadas cerca de 250 fobias; solo en nuestro país se calcula que más del 3 % de la población sufre algún tipo de ella. ¿Quieres conocer cuáles son las fobias más frecuentes?

1. Agorafobia

La agorafobia es el temor que sienten algunas personas a los espacios públicos y concurridos, los cuales no tienen por qué ser abiertos. Las reacciones de las personas que la padecen se deben al temor a no poder escapar de un espacio público o a no poder conseguir ayuda en caso de necesitarla.

2. Claustrofobia

La claustrofobia, en cambio, es el miedo a los espacios cerrados, ya sea una habitación de reducidas dimensiones, un ascensor o un vagón de metro. Los que sufren esta fobia sienten el temor de no poder salir de ese espacio tan pequeño y ello hace que desarrollen pensamientos negativos y catastrofistas, como creer que no tienen aire para respirar.

3. Aerofobia

Otra de las fobias más habituales, el miedo a volar. A menudo está asociada a otras fobias, como la claustrofobia o la acrofobia, de la que hablaremos a continuación, pero no siempre es así.

4. Acrofobia

No es otra cosa que el miedo a las alturas, el conocido vértigo excesivo que experimentan algunas personas y que les impide asomarse a balcones o ventanas. El terror a caerse y al vacío que sufren estos pacientes es tal que se bloquean, experimentan taquicardias, sudores fríos y mareos, síntomas comunes a las demás fobias que, como en el caso de las mismas, pueden desembocar en ataques de pánico.

5. Glosofobia

El temido miedo a hablar en público también puede convertirse en una fobia, hasta tal punto de que hay personas que se paralizan cuando hablan delante de mucha gente. Suele estar ligado al tradicional miedo escénico y al terror que sienten algunos sujetos de hacer el ridículo delante de tanta gente. Por ello, los especialistas lo abordan junto a otros trastornos como inseguridad, baja autoestima y trastornos infantiles.

6. Dentofobia

Otra de las fobias más habituales: el temor al dentista. La mayoría de los expertos apuntan que detrás de esta fobia puede encontrarse una mala experiencia con estos profesionales, un episodio traumático que, si no se trata adecuadamente, condicionará la relación normal con este especialista.

7. Tripanofobia

Relacionado igualmente con la salud, el miedo a las agujas, también conocido como belonefobia, afecta un porcentaje destacado de la sociedad y, como en el caso de otras fobias, suele estar asociada al temor que experimentan algunas personas al ver la sangre.

8. Carcinofobia

El temor a padecer cáncer es más frecuente de lo que pensamos, sobre todo a tenor de la incidencia que tiene esta afección en nuestra sociedad. Está relacionada con personas hipocondríacas, que sienten verdadero malestar y angustia ante cualquier síntoma que sufren.

9. Aracnofobia

Es la fobia más común entre la población y también encabeza la lista de las zoofobias más habituales. Algunos expertos ven a la aracnofobia como una técnica de supervivencia que ha evolucionado hasta la sociedad actual, debido principalmente al carácter mortal de algunas especies, aunque en realidad la mayoría de las arañas no suponen ningún riesgo para nuestra salud.

10. Ofidiofobia

Como las arañas, las serpientes también han sido objeto de temor debido a su condición de peligrosas. Muchas veces no hace falta tener delante una serpiente real para acusar los síntomas asociados a este trastorno; basta con ver una imagen de ella o de su entorno para comenzar a sentir temblores o sudoración.

11. Cinofobia

Aunque parezca raro, esta zoofobia también es más común de lo que pensamos. El miedo a los perros o a las enfermedades relacionadas con ellos (rabia…) se ha visto agravado por algunas agresiones de cánidos. Igualmente, en algunos casos, se esconde detrás una mala experiencia con este animal. Y también los gatos son objeto de fobia, siendo la ailurofobia un trastorno muy comun.

12. Astrafobia o brontofobia

Dejando a un lado los trastornos de ansiedad vinculados con distintas zoofobias, el miedo a los rayos y truenos es otra de las fobias más tratadas. Para las personas que la sufren, las tormentas se convierten en una situación sumamente desagradable. De ahí que, como en todos los casos anteriores, sea necesario recibir asesoramiento especializado.

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