Depresión, guayabo, estrés y otras enfermedades típicas de la Navidad

Muchos las han padecido y, de pronto, recaerán en los días que están por venir, a menos de que se tomen los debidos correctivos.

1. Estrés. De acuerdo con una investigación científica realizada por el portal Travelodge, el 42 % de las mujeres dice que la época navideña que está por comenzar en pleno es la "más estresante del año". Entre las causas mencionadas por el citado estudio están la presión (por todos los preparativos y compromisos) y transtornos del sueño (para poder cumplir con la agenda de las actividades propias de la época), según el portal Salud 180. Si a esto se suman los trancones, la necesidad de hacer mil cosas a la vez y la falta de tiempo, los resultados pueden ser nefastos.

2. Gastritis, colitis y otras enfermedades del sistema digestivo. Las razones son obvias y no necesitan mediciones científicas para reportarlo. La Navidad y el Año Nuevo son épocas especiales que nos invitan a juntarnos con amigos, compañeros de trabajo y familia, casi siempre en torno a deliciosos platos de la época a los que no estamos acostumbrados habitualmente. Por eso no es sorpresivo que al final de la temporada haya más pacientes afectados con ese tipo de males, especialmente si se tiene predisposición a padecerlos. El consejo, como siempre, es disfrutar con moderación y combinar la rutina de los días navideños con ejercicio. De acuerdo con el portal argentino de La Nación, "los diabéticos e hipertensos deben tener más cuidado con el consumo".

3. Depresión. Paradójicamente esta enfermedad es una de las más recurrentes en estos días en que se supone que la felicidad es la invitada a todos los escenarios. De acuerdo con Manuel González Oscoy, catedrático de la Unam (México) "diversos estudios han demostrado que en la temporada navideña los casos de depresión y suicidios aumentan hasta 40%", dice el portal 2.esmas.com.

De acuerdo con algunos especialistas, la depresión puede llegar, entre otras cosas, por el bombardeo de imágenes publicitarias y sensoriales que obligan a la gente a sintonizarse con la que es supuestamente la época más feliz del año, aunque en el interior de las personas no existan motivos para sentirse así. Hay que tener cuidado, eso sí, de no confundir una sensación temporal de tristeza o desconsuelo (justificada por algún hecho puntual como un luto, una pérdida del trabajo o la ruptura de una relación amorosa) que tradicionalmente se revive en estos días, pero que no debe ser catalogada como depresión, que es una condición muy diferente.

4. Guayabo. Para nadie es una sorpresa que esa sensación de malestar, desazón y ganas de no levantarse de la cama sea una de las enfermedades más típicas de estos días de festejos en los que el licor abunda a la par de las comidas. Sea como sea, cuídese de esta enfermedad que en casos extremos lo puede llevar de urgencias a la clínica o le puede ocasionar problemas con su familia o su trabajo. Y por nada del mundo se le ocurra mezclar gasolina y alcohol pues todos ya conocemos las consecuencias nefastas de hacerlo.

5. 'Guayabo moral y financiero'. Este mal suele presentarse en la mitad de la época decembrina, pero especialmente al final de ella cuando quienes la padecen se dan cuenta de los excesos de todo tipo que han cometido, en nombre de las fiestas. Se puede 'contagiar' al cometer todo tipo de desmanes durante los días navideños y sus síntomas son preocupación permanente, pensadera y angustia por lo que vendrá después de que los festejos terminen y la vida retome su ritmo normal, pero usted esté descuadrado con su presupuesto o su familia no quiera recordar lo que es pasar otra Navidad con usted.

Via pulzo.com