Celos patológicos

Sentir celos en una relación de pareja es algo normal, pero ¿Dónde está el límite? Algunas personas confunden sentir celos con sentir amor por la pareja, pero cuando éstos son compulsivos, recurrentes, intensos, infundados, interfieren en la comunicación y afectan a la confianza entre la pareja podemos hablar de celos patológicos.

La persona celosa compulsiva refiere que tiene un miedo intenso a perder a su pareja o a la infidelidad. Normalmente, suelen reconocer que son miedos o pensamientos irracionales, que no se basan en ninguna causa real, pero manifiestan que “no lo pueden evitar”.

Los celos patológicos interfieren de forma negativa en la relación de pareja, causando un gran deterioro para ambos miembros. La persona celosa siente ansiedad, impulsividad, inseguridad, pensamientos intrusivos, y un deseo intenso de control y posesión de la pareja. Por otro lado, el otro miembro de la pareja que los sufre siente un desgaste psicológico por tener que explicar continuamente sus actos, y hacer frente a las preguntas e inseguridades de su pareja. Es una situación debilitadora para ambos que deteriora la relación e incluso puede conllevar una ruptura.

La persona celosa suele investigar el móvil de su pareja, ordenador, bolso, cartera, revisar la última conexión del whatsapp, redes sociales, correo personal, bolsillos intentando encontrar “pruebas” que confirmen con hechos sus pensamientos sobre una posible infidelidad de su pareja. Con estos hechos compulsivos, piensan erróneamente, que calmarán su ansiedad, pero es una “tranquilidad temporal”, ya que en un corto período de tiempo necesitarán volver a comprobarlo, aumentando así su ansiedad o inseguridad.

Suele ocurrir también, que al buscar en los enseres personales de la pareja, encuentren “algo” que puedan malinterpretar y pidan explicaciones a su pareja, perdiendo así su confianza y dañando la relación con discusiones innecesarias. Con este comportamiento, la persona celosa suele provocar lo que teme, perder a la persona querida.

Es frecuente que la persona celosa, no sólo sienta celos de su pareja sino también de hijos, familia, amigos o del trabajo.

Cuando una persona sufre celos patológicos debe recibir tratamiento psicológico que le ayude a superarlos a través de:

    Enfrentarse a sus miedos e inseguridades.
     Reducir y controlar las emociones negativas (ansiedad, depresión, ira, enfado, inseguridad, miedos…) consecuentes del problema.
    Modificar pensamientos intrusivos.
    Aumentar su autoestima.
    Técnicas de relajación.
    Aprender a confiar en su pareja.


Via psicologiaenzaragoza.es