miércoles, abril 02, 2014

Niños con fobias escolares ¿Cómo advertirlas? ¿Qué Hacer?

Desde el instante en que los padres eligen el jardín de infantil o el colegio a donde el niño(a) va a iniciar su etapa escolar, surgen temores tanto en  los progenitores (por lo que significa separarse de su retoño) como en el niño(a) quién dejará su hogar.

Ahora, el  escolar deberá enfrentarse a nuevas situaciones que exigen responsabilidad, cooperación, solidaridad, independencia, etc… Esto le genera  ansiedad; para él es enfrentarse a un mundo nuevo incierto, con personas a las cuales no conoce a horarios y actividades diferentes a las que está acostumbrado a realizar y a permanecer tiempo lejos de su hogar… Tanto los padres como los maestros  juegan  un papel muy  importante en esta  etapa  de adaptación. Los papitos  desde el hogar animándolos y transmitiéndoles  seguridad y amor. Los maestros en el colegio, quienes  serán responsables del bienestar y sano desarrollo de los  infantes puestos desde momento a su cuidado y formación.


Algunos de los problemas psicológicos más frecuentes  de  niños(as) en el ambiente escolar es la ansiedad.

La ansiedad definida como un  estado de tensión excesiva  acompañada  de un  “terror”  inexpresable , frente a una situación  considerada amenazante. Los chiquillos (as)  ansiosos se muestran a menudo inferiores a sus compañeros, son tímidos frente a su profesor y presenta cambios en su expresión frente a una pregunta del maestro, su  ritmo cardíaco se acelera e incluso puede  presentar  vómito y   transpiración.
Estas reacciones  preocupantes por cierto, pueden llegar a convertirse en serios problemas llamados neurosis de ansiedad.

Tanto los representantes como los maestros y el ambiente escolar, pueden ser la causa de la ansiedad en los niños  (as); los padres cuando se fijan metas demasiado altas  respecto a su hijo(a) especialmente en lo referente a  resultados académicos y el educador que intenta obtener  lo mejor de sus objetivos de estudio  a través de los logros de sus estudiantes, ejerciendo a veces sin saberlo,  cierta presión mediante las llamadas    recompensas por un logro alcanzado. Este reto sin duda  será más fácil para un alumno aventajado y su autoestima estará bien, pero no ocurrirá  lo mismo en un alumno menos capaz. Este  se sentirá en desventaja y su frustración lo llevará a caer en la ansiedad.

Importante enfatizar que en nuestras aulas de clase encontramos alumnos con características  muy distintas en cuanto a: ritmo de aprendizaje, desarrollo psicosocial y personal , desarrollo  físico, es decir: con diferencias individuales parta tener en cuenta. Por lo tanto lo que en un estudiante puede causar ansiedad, en otro no.

El maestro tiene la difícil tarea de orientar el trabajo de cada niño de acuerdo a sus posibilidades, exigiendo a cada uno logros según sus características individuales.

La actitud del maestro deberá ser de comprensión y ayuda. Nunca de desaprobación y/o presión. A medida que los niños crecen, las metas y expectativas que se fijan son más realistas y por lo tanto más fáciles de alcanzar. Pero mientras esto ocurre, los padres y maestros deberán proponerle a sus hijos y alumnos metas realizables y alentarlos a alcanzarlas.

La ansiedad en los niños no siempre proviene  del ambiente escolar, existen situaciones en los hogares que crean  ansiedad en los niños las cuales deben ser tenidas  en cuenta. El cambio de residencia, la perdida de algo o de alguien,  su mascota (por ejemplo), un ser querido, problemas de pareja  (que son a menudo percibidas por  los niños), son situaciones que frecuentemente causan  ansiedad no solo en los pequeños, sino también  en púberes y adolescentes donde las consecuencias en algunos casos pueden ser gravísimas. Es posible que a el maestro ignore que un estudiante está presentando este tipo de problema, de ahí la importancia de una  buena y fluida comunicación con su grupo y con los padres de sus estudiantes. El maestro deberá  averiguar las causas del estado del niño(a), comprenderlo y dar acompañamiento decidido. En caso contrario el  afectado será un  futuro candidato al   fracaso escolar. Si el Centro educativo dispone de una  psicoorientadora  pídele  ayuda de inmediato.

FOBIA ESCOLAR

Los temores por lo general se manifiestan cuando un niño(a) se rehúsa a asistir a su centro escolar, esta resistencia puede estar acompañada de mareos, náuseas, dolores de cabeza, vómito y llanto y en casos crónicos diarreas e insomnio.

Una excesiva ansiedad ante el fracaso escolar puede estar convirtiéndose en fobia;  la cual puede iniciarse con una situación ya experimentada dentro del ambiente escolar, los compañeros, e incluso su mismo profesor.  la ansiedad que se generó en el niño por su separación de la familia  principalmente de la madre , el chico simplemente se niega a asistir al centro de enseñanza por cualquier motivo. Cuando observemos un infante con los síntomas enunciados anteriormente, es posible que estemos frente a un niño(a) con fobia Escolar.

Para algunos niños, la fobia escolar como lo anotamos anteriormente es la respuesta al miedo de relacionarse con otros niños, ante los cuales pierde su liderazgo …  Ya no es  el centro de atención y cualquier situación  le podría generar ansiedad.

Entre los elementos  que pueden incidir  en la fobia escolar están: la  sobre-protección en el hogar, perdida de auto imagen, alguna actuación desacertada del maestro y tendencias neuróticas.

Hay otros trastornos que con frecuencia encontramos en las aulas escolares:  tics ,tartamudeo, la euneresis (adquirida por un trauma o circunstancia emocional), la encopresis, la mentira y el robo etc. Estos problemas psicológicos propios de la etapa escolar  por lo común son transitorios no severos;  los padres y maestros y en general los adultos deben tratar de acercarse al pequeño,  establecer una buena comunicación y comprenderlo.

Via profesoresonline.cl

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