¿Cómo saber si un adolescente está deprimido?

Aunque existen muchas conductas adolescentes que pueden pasar como “normales”, debido a lo difícil que es esta etapa para ellos física y emocionalmente, la depresión, las ideas suicidas y los sentimientos de desesperación no se cuentan entre ellas. Muchos padres minimizan la importancia de los estados depresivos de sus hijos mientras estos sufren en silencio.

Es bueno saber que tales experiencias pueden preverse y tratarse si somos lo suficientemente sensibles y nos enfocamos para detectar signos tempranos del problema.
Señales de depresión en los adolescentes

Los signos más comunes de estados depresivos en los adolescentes incluyen:

    Llantos frecuentes o tristeza: Suele expresarse al usar ropa oscura, escribir poemas pesimistas o diarios con temas insanos, escuchar música depresiva, entre otros.
    Desesperanza: Pesimismo en relación con el futuro, descuido en la higiene personal, darse por vencido en la escuela.
    Disminución del interés en actividades que antes se disfrutaban: abandono de la escuela, el deporte y otras actividades.
    Aburrimiento o apatía: Fugas de la escuela, baja motivación, falta de energía.
    Aislamiento de amigos y parientes: Rechazo a reuniones sociales, pasar mucho tiempo en soledad, negación a conversar, dificultades para mantener las amistades.
    Baja autoestima: Sentimientos de culpa, sentimientos de falta de mérito o no aceptación de sí mismo.
    Irritabilidad o ira: Maltrato a miembros de la familia, actuaciones sarcásticas o críticas rebajando el esfuerzo de los otros.
    Lamentación: Quejas frecuenta de enfermedades físicas, como dolores de cabeza y estómago.
    Resultados académicos bajos: malas notas, ausencia a la escuela, dificultades para concentrarse.
    Cambios en los patrones alimenticios o de sueño: Dormir todo el día, estar toda la noche viendo televisión, pérdida o ganancia de peso.
    Evasión: Escaparse de casa.
    Conductas autodestructivas o comentarios suicidas: discursos que expresan las intenciones suicidas, preocupación por la muerte, consumo de alcohol o drogas, daños auto-inflingidos.

Previniendo la depresión en la adolescencia

Los adolescentes deprimidos suelen convertirse en adultos con los mismos problemas, que viven años de sufrimientos y baja productividad en la vida. No dejes que la depresión se instale en el universo de tu hijo. Alienta en él relaciones de amistad saludables, una imagen positiva de sí mismo y una vida equilibrada.

Si has detectado las señales mencionadas, debes saber que la depresión en los adolescentes es perfectamente tratable y puede ser superada con tratamientos terapéuticos en apenas unos meses.

Ayuda a tu hijo y estarás asegurándole una vida optimista y de felicidad.

Via enbuenasalud.org