La agorafobia es un tipo de trastorno de ansiedad donde se evitan las
situaciones a las cuales se les tienen miedo y pueden causar ataques de
pánico. Puede evitarse, por ejemplo, estar solo, dejar el hogar (aun
momentáneamente) o cualquier otro tipo de situación donde la persona se
puede sentar atrapada, avergonzada o indefensa en caso de que aparezcan
las sensaciones de pánico.
Las personas con agorafobia suelen tener dificultad para sentirse
seguros en un lugar público, especialmente lugares donde hay tumultos de
gente. El miedo puede ser tan avasallante que incluso se puede sentir
una especie de encierro en el hogar mismo.
El tratamiento para este trastorno puede ser muy complicado y agotador
puesto que en general se usan terapias de exposición, donde la persona
debe enfrentar sus miedos llevándolos al acto concreto, el que les
genera esta ansiedad desmesurada. Pero con medicación adecuada y
psicoterapia, se puede lograr controlar la situación para poder vivir de
una manera mucho mejor.
Este suele ser un trastorno que, por lo general, se deriva de los
trastornos de ataques de pánico. Se comienza a asociar la aparición de
un ataque de pánico con la exposición en distintos escenarios, como
puede ser encontrarse en un lugar público, y se comienza a sentir un
miedo intenso ante la idea de volver a estar expuesto de esa manera,
puesto que se asocia con la recurrencia de un ataque; es una especie de
miedo anticipatorio.
A veces este miedo a los ataques de pánico en sí es tan intenso, que la
persona comienza a evitar todo tipo de situaciones que cree se los
causarán.
Via: blogdefarmacia.com
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