La personalidad múltiple es algo que todos ya conocen y sobre lo que han oído hablar. Ha sido investigada y tratada en infinidad de películas y novelas. Pero… ¿Existe, o es un invento? En el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM4), el más significativo en cuanto a trastornos mentales, se la menciona como trastorno de identidad disociativo.
Allí lo cuentan como la presencia de una o más identidades o personalidades en un mismo personaje, cada una con su propio forma de observar e interactuar con el ambiente. También coligado con la perdida de la memoria, no la falta de memoria normal, sino pequeños lapsos amnésicos. Aunque no debe enredarse con la esquizofrenia que está además asociada a la disociación.
La disociación es un componente psicológico de protección en el cual la identidad, memoria, ideas, sentimientos o percepciones propias se hallan apartadas del conocimiento consecuente y no pueden ser recuperadas o experimentadas voluntariamente.
Todas las personas se disgregan en algún momento, como por ejemplo cuando la gente se da recuento después de haber llegado a su casa, que no se acuerdan gran parte del camino porque se quedaban preocupadas pensando en aprietos personales, o atentos a alguna cosa. Pero cuando se da en alto grado origina una ruptura, por culpa de la cual la persona no tiene impresiones de sí misma y las percepciones de los hechos de la vida diaria.
Fuente: pensarenpsicologia.com
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