Diferencias psicológicas entre hombres y mujeres

Hablar de las diferencias psicológicas entre hombres y mujeres puede llevar, en algunos casos, a perpetuar estereotipos que han alimentando las diferencias de género en la sociedad. Sencillamente, porque hombres y mujeres han estado condicionados por su rol social. Sin embargo, estamos en una etapa en la que la inteligencia emocional permite a hombres y mujeres redescubrirse a sí mismos en una nueva perspectiva. La perspectiva emocional que es tan importante en la vida.

Esta diferencia de roles ha dado lugar a una diferencia habitual entre hombres y mujeres. El modo de expresar los sentimientos puede ser diferente. Ellos, por ejemplo, pueden hacerlo más a través de acciones concretas que esconden un mensaje. Por el contrario, ellas dan mucha importancia a la palabra. De hecho, muchas mujeres destacan por su inteligencia verbal.

Cómo comprender las diferencias

El hecho de que las mujeres sean más comunicativas en relación con su estado emocional está vinculado con la propia amistad femenina como terapia. Es decir, los lazos femeninos pueden ser tan fuertes que constituyen una fuente inagotable de bienestar para las amigas y un protector frente al estrés.

Con frecuencia, los hombres tienden a ser más pragmáticos, es decir, interpretan la realidad desde un punto de vista práctico. Ellas en cambio, tienden a dar más vueltas a las cosas, y esto hace que puedan sufrir más por los problemas e incluso, tener una mayor tendencia hacia la tristeza.

Generalmente, también existe una diferencia en la percepción del riesgo de una situación determinada, vista por hombres o mujeres. Ellas suelen ser más prudentes en la evaluación de situaciones de riesgo.

La diferencia entre hombres y mujeres también está marcada por el distinto umbral de dolor que tienen ellos y ellas. Pese a que con tanta frecuencia se habla de la fortaleza física de los hombres, conviene recordar también la fortaleza mental de las mujeres. Pero también una fortaleza física que queda en evidencia en la tolerancia al dolor que implica el momento del parto.

Desde el punto de vista emocional, la mujer tiene una amplia riqueza de matices en su estado de ánimo. Conecta más con su interioridad que el hombre que vive más centrado en tareas externas. Sin embargo, estas diferencias también están muy condicionadas por los propios roles sociales asumidos durante tanto tiempo.

Existen muchos estereotipos creados en torno a estas diferencias, sin embargo, la cultura también produce una profunda huella en los comportamientos sociales. Por ejemplo, mientras que el factor estético ha estado vinculado al rol femenino durante mucho tiempo, en la sociedad actual las cosas han evolucionado y muchos de ellos también viven en primera persona el culto al cuerpo.

Conocimiento individual del ser humano

Y lo cierto es que como bien comprobarás en tu propia experiencia diaria, tendrás amigos y amigas que más allá de las generalidades, tienen sus particularidades. Porque cada persona es diferente. Y es aconsejable, por pura higiene mental, afrontar las relaciones desde esta perspectiva de lo individual, atendiendo al ser humano concreto. Porque el mundo está lleno de hombres que tienen una alta capacidad verbal y mujeres pragmáticas.

Via psicoblog.com